Un ejercicio de reflexión

Ayer, hablando con Tb, me comentó que había hecho un ejercicio de reflexión en clase sobre las 10 cosas que le hacían feliz. Me hizo pensar. Me gustó y me ha hecho escribir esta entrada.
Pienso a medida que escribo, así que juntos ( el pc de mi madre, mi mantita y yo) descubriremos cuáles son las diez cosas que me hacen feliz. Que me roban una sonrisa y por las que vale la pena despertarse.

1. Me hace feliz estar con mi gente. Con mis niñas, en cualquier cafetería tomando una cervecita con papas y olivas, mientras hablamos de nuestros secretos más profundos, de nuestras estupideces más humanas, de nuestros amores perdidos, del sexo salvaje y divertido. Con mis amigos de siempre, tomando los mojitos que prepara Eva, en nuestro bar de siempre y riendo y comentando pelis que nos hacen pensar, y libros que nos quitan horas de sueño. De música, ya cuesta más hablar, quizá porque alguno que otro es músico y por lo tanto (algo) intolerable, pero siempre acaban con emociones musicales agradables.

2. Me hace feliz levantarme los domingos (cuando la resaca no viene a visitarme) escuchando algún cd clásico que mi padre elige a conciencia (L. Cohen, B. Springsteen, Beatles) y preparar con calma el desayuno. Salir con el colacao y las tostadas a la terraza y desayunar, junto a mis padres, leyendo a Maruja Torres o a Manuel Vicent, mientras los rayitos de sol atraviesan el toldo a rayas de la terraza.

3. Me encanta andar descalza hasta la playa. Recoger a mis primos pequeños e ir con ellos hacia mi playa de siempre, esa que cada vez está más llena y que cada vez tiene menos arena y menos dunas. Hablar de quién se subirá antes en la barca y saber que, si hay algas seré yo la primera y ellos, los peques, los que me llevarán hasta lo hondo, dónde ya no hay algas que me persigan y dónde podré bañarme y dejarles sitio a ellos en la barca.

4. Me gusta disfrutar de una tarde o una noche en el sofa, con buena compañía. Taparnos con la mantita, esa suave y morada que me regalaron las últimas navidades. Y ver pelis antiguas, una detrás de otra, y reir a carcajadas gracias a mi dios del cine ( si, Trueba, también es el tuyo).

5. Me roban una sonrisa la luna y las estrellas. No tiene por qué estar llena ni el cielo repleto de puntitos dorados. Es una mezcla entre el momento en el que me encuentre y lo que me cuente el cielo esa noche. A veces me roba una sonrisa, otras una lágrima, pero aun así, me encanta mirarlo.

6. Me hace feliz saber que la gente se preocupa por mi. Si. Me gusta que la gente, mi gente, escuche una canción y me la mande, lea un libro y me lo recomiende, vea una peli y me abra una ventanita del messenger, sólo para dejarme el título. Me gusta porque yo también lo hago. Porque cuando estás viendo una peli y piensas en alguién, es bueno decírselo. Le harás sonreir, porque sin venir a cuento te acordaste de él o de ella. Es una de esas pequeñas cosas que tanto aprecio. (Si, me gustan las pequeñas cosas que hacen que mi día a día sea mejor).

7. Me hace feliz que me despierten por la noche, besándome. Poco a poco. Y que me hagan el amor mientras estoy en ese momento en el que la realidad es sueño y el sueño realidad. Y el placer te hace despertarte, pero con los ojos cerrados, porque no quieres que el sueño se desvanezca, ni que la realidad se pierda. Quieres quedarte así el resto de tu vida. Y te fundes en una sola persona y todo termina entre caricias que hacen que la piel se ponga de gallina. Y te duermes, pensando que ha sido el mejor sueño que has tenido nunca. Y te despiertas, y sonries, porque el sueño ha sido real.

8. Me encanta pasear por la playa. En verano o en invierno. Al amanecer o al atardecer. Con lluvia o sin ella. Me encanta. Disfruto de una buena conversación a orillas del mar. Con alguien especial, con las olas, o conmigo misma. Me gusta encontrar piedrecitas blancas, esas planas y que viven entre el agua y la arena. Cogerlas y guardarlas en mi bote de los recuerdos. Ese bote que estoy llenando y que tan buenos momentos significa. En cada playa, en cada momento especial, un recuerdo mágico guardado en mi bote de cristal.

9. Me gustan las sorpresas. Las buenas, no las malas. Las que te hace la gente que te quiere, la que se acuerda de ti. Las que están llenas de detalles, de complicidad, de cariño, las que están trabajadas. Me gustan las miradas con intenciones, miradas que esconden sorpresas. Y me gusta que me sorprendan ( y nunca me canso de eso) y me gusta sorprender. Que me hagan tan feliz y hacer feliz cuesta tan poco cuando se tiene algo de imaginación. La lástima es que en este mundo en el que vivimos, poco a poco, la imaginación al igual que la inocencia, se va perdiendo con el tiempo.

10. Me hace feliz viajar. Sola, a San Diego o acompañada a Formentera. Pasar una nochevieja en París o un verano en Londres. Disfrutar en una tienda de camping en Nueva York o dormir junto a las focas en San Francisco. Escuchar una canción especial en un albergue en Amsterdam o correr detrás de las ardillas en New Brunswick o en Hyde Park. Viajar es conocer a gente, eso me hace feliz. Viajar es aprender de otras culturas y eso también me hace feliz. Viajar es descubrir lugares mágicos, y eso me hace feliz. Viajar te hace conocerte un poquito más y eso..me hace feliz.

Aquí están las diez cosas que, elegidas esta tarde me hacen feliz hoy y mañana y pasado mañana. Igual dentro de unos días, pensando, se me ocurre alguna más. Pero hoy, me he decantado por éstas.

¿ Cuáles son las tuyas ?

.)

Emociones musicales

¿Cuántas veces empleamos la música para incrementar la felicidad en un determinado momento, o recurrimos a ella para aliviar el impacto de una pena? ¿ Por qué recordamos un viejo amor al escuchar una canción en concreto?
¿ Se mueven las emociones al son de la música?
Desde tiempos inmemoriales la música afecta y transforma al ser humano. Escuchar o interpretar música, mejora el rendimiento cerebral, sentimental, corporal y, por tanto, puede ayudar a incrementar el nivel de felicidad.


Aquí os dejo mi canción de hoy :)

http://www.youtube.com/watch?v=NXuuIu8zDOs


Al mal tiempo...buena cara :)

Just a perfect day

Ayer fue un día perfecto.

Uno de esos días en que no necesitas nada más.
Me levanté tarde, acompañé a mi madre a hacer unas cosas y luego quedé con una amiga a comer.
Reímos, hablamos, compartimos comida, anécdotas semanales, sentimientos ocultos, fuimos de compras.
Nos desahogamos.
Nos relajamos.
Nos dimos caprichos.
Y cuando nos dimos cuenta, fue maravilloso.
No teníamos ninguna preocupación.
Todo era perfecto.
Estábamos tranquilas.
No había discusiones pendientes, ni malos rollos con nadie.
No había nada que hacer, más que disfrutar del momento. Gozar del instante en el que nos encontrábamos.
Caminamos bajo la lluvia, haciendo parar el tiempo en cada esquina.

Más tarde fui al teatro con mis amigos de siempre, y la compañía de Nacho Duato me endulzó aun más el día.
Cenamos en una terraza, resguardados por unas sombrillas para el sol que intentaban evitar que la lluvia nos mojara.
No lo consiguieron.
Terminamos empapados. Empapados, pero felices.
Fue una cena diferente.
Fue un día perfecto.

:)

Resaca

__Formentera Felicità__

Hoy, una canción con sonrisa :)

No necesito yo decirlo en alto

pero cantarlo a veces, sí que ayuda

el caso es que esa tarde te esperaba

en una calle coagulada del Madrid de mis angustias.

Te estás haciendo el lio, me decias,

hablándole a mi ombligo desde arriba.

Te gusta lo que menos te conviene

saltas de todos los trenes,

sin seguro de suicida.

Te vueles loco con los desniveles

quieres a quien no te quiere y vas detrás de los artistas.

Sin rumbo, sin freno, sin orden, sin sueño

sin planes, sin nada, huyendo de esta mísera resaca.

Estoy buscando a la desesperada,

alguien como tú pero que me quiera.

Se posan en la acera las palomas,

saben que no es una broma,

que yo te quiera y no me quieras.

Las musas del amor se van de juerga,

no perdonan estas letras, del fracaso en primavera.

Sin rumbo, sin freno, sin orden, sin sueño
sin planes, sin nada, huyendo del amor y su resaca.

Sin gloria, sin pena, sin otra, sin letras,

sin musas, sin nada, menuda la que tengo aqui ,montada.

Y es q al final me fui sin esperarte,

silbando con la musica a otra parte.

Llevar tanto pasado encima me lo tengo prohibido.

Prefiero tu fantasma, rondándome por siempre,

prefiero derrumbarme, hacer siempre de puente,

quitarme ésto de encima, hacer algo diferente.

Tener menos que nada, que es mucho mas urgente,

tener de nuevo veinte.

Sin rumbo, sin freno, sin orden, sin sueños,

sin planes, sin nada huyendo del amor y su resaca.

Sin gloria, sin pena, sin otra, sin letras,

sin musas, sin nada, matando tu recuerdo a botelladas.

http://www.lucasfree.com/

A la luna de Valencia

Con una luna así...y con buena compañía...
conduciría hasta una playa desierta.
Y acompañados de una botella de ron miel...
esperaría a que me susurraran mentiras al oido.

La banda sonora serían las olas y nuestras risas...
nos comeríamos a besos haciendo parar al tiempo.
Y el amanecer nos sorprendería...
abrazados y exhaustos tras una noche de amor sincero.


Miénteme y dime que me quieres.

:)

1-0

Pensamos, racionalizamos, marinamos los actos, las miradas e incluso los gestos de la gente de nuestro al rededor.

Recapacitamos sobre sus palabras, escribimos sus hechos.

Y sin embargo, somos incapaces de entender nada.

Por lo menos, en mi caso, alguien me ayuda a pensarlo.

Ella siempre está ahí para hacerme ver las cosas.

Para centrarme y de vez en cuando, enderezarme.
Para dar un poquito de luz a mi neblina.

Por que forma parte de mi, es esencial en mi vida.

Por que es capaz de analizar lo que a mi se me escapa.

Gracias. :)

Apreciamos las dificultades, saboreamos los retos.

Nos atrae lo complicado.

¿Qué le vamos a hacer?

...Al final hoy vencí a la pereza y me fui a nadar...

*Sonrisas como las nuestras*

Ayer fui a tu casa.

Me tomé una Alhambra a tu salud.

Te eché un poquito más de menos...

Retomando viejas costumbres

Hoy me han regalado una agenda telefónica.
Es extraño, como en el s.XXI ya no se utilizan objetos, que antes nos resultaban necesarios.
Me ha hecho ilusión. He comenzado a copiar nombres, teléfonos y he incluido emails y faxes...
Ha sido extraño.

Hoy también, he encontrado una vieja libreta en la que solía escribir las frases, palabras y sentimientos que rondaban por mi cabeza, hace ya algunos años.
Me he descubierto entre las páginas amarillentas.
Lo he leído con alegría, acompañada de un cd de obras románticas que un amigo me grabó ayer. Ha sido un buen momento.
Me he dado cuenta, que voy por el buen camino.
Que estoy haciendo lo correcto.
Que ahora mi felicidad es más real de lo que lo era antes.
Que ahora ya no me engaño.

Me gusta mi vida.

Disfruto de mi momento.

:)

Una proposición indecente

- ¿Te he dicho alguna vez que te quiero?

- No.

- Te quiero.
- Todavía...

- Siempre.

Comer, Beber y Amar

La gastronomía y el sexo. El sexo y la gastronomía. Dos placeres fundamentales y básicos para subsistir en este mundo.

A menudo vemos en la gran pantalla escenas de amor, relacionadas con la comida. Cómo olvidar esa escena del Padrino III en la que la prima está preparando gnocchis. La tensión sexual que ahí se respira, te absorve por completo. O la famosa secuencia de Nueve semanas y media. O la dulce y sensual película Un toque de canela, que nos transporta al Estambul de las especias, dónde todo transcurre en la cocina; el amor y la pasión sazonados con canela.

Para quien aprecie el buen sexo y la comida, no hay nada como hacer el amor en la cocina. Entre aromas y sabores, la pasión te envuelve, Acompañado de un buen vino, el sexo y el alimento, el hambre y las ganas... Por que las explosiones se suceden como en una película de acción, la boca reconoce en el paladar sabores que no se habían combinado antes.

Pétalos de rosa en la comida, cuerpos espolvoreados con harina, fresas combinadas con champán.

Os dejo aquí unas películas que relacionan ésto de lo que os hablaba, el sexo y la comida, el hambre y las ganas.

¡Qué aproveche!

La grande bouffe, El padrino, Un toque de canela, 2001: una odisea en el espacio, Chocolat, Viridiana, American Cuisine, Fuera de carta, Nueves semanas y media, Como agua para chocolate, American Pie, Deliciosamente Martha, El cartero siempre llama dos veces...

Saboreadlas, por que cada una tiene su aroma.


:)

Retales de una vida

" Mañana me voy de viaje y tengo q vaciar la cámara de fotos."

Es algo muy normal, ¿verdad? Pero cuando me lo han dicho, me he preguntado, ¿ por qué será que siempre esperamos a vaciar la tarjeta cuando estamos preparando el siguiente viaje? Y entiéndase viaje, como quien se va a una cena q merezca la pena llevar la cámara, o a una fiesta, o donde sea.
El caso es que, muchas veces, retrasamos el vaciar las fotos hasta q no tenemos algo con que volver a llenar esa tarjeta dichosa. ¿Pasará lo mismo con el resto de cosas? Es decir, ¿en las relaciones humanas, tendemos a sustituir una cosa por otra cuando aun no hemos terminado la primera?
Qué triste sería actuar así. Espero que no esté generalizado. Si así fuera,nos perderíamos el placer de saborear las cosas como se merecen.

No es más feliz quién siempre tiene, sino quien sabe apreciar lo q ha tenido. Y además, con una sonrisa.


:)